1. "Las comunidades son redes de
relaciones personales que proporcionan sociabilidad, apoyo, información y un
sentido de pertenencia e identidad social" (Wellman, 2001). En ellas debe
haber una organización: roles, liderazgo, tareas, reglas de funcionamiento
entre los integrantes del grupo para generar alternativas, discutirlas,
evaluarlas, en su caso tomar decisiones, y un código de conducta.
2. Las comunidades de aprendizaje
pretenden la construcción personal y/o colectiva de determinados conocimientos
mediante las interacciones entre sus integrantes. Hay un objetivo común y
compromiso relacionado con el aprendizaje y construcción de nuevos
conocimientos y habilidades. Los aprendices son conscientes de que se necesitan
para realizar sus aprendizajes y están dispuestos a cumplir con los demás
asumiendo el rol que les corresponda.
3. El aprendizaje cooperativo es un
proceso basado en la argumentación y el conocimiento compartido, en el que los
alumnos aprenden unos de otros mientras proponen y comparten ideas para
resolver una tarea (elaborar un producto, obtener un resultado), dialogando y
reflexionando sobre sus ideas y las de los compañeros. El trabajo colaborativo
consiste en la realización de actividades intencionales por parte de un grupo
de personas con el fin de alcanzar unos objetivos específicos.
4. El papel del profesor consiste en
orientar y motivar.
5. Las claves del éxito son: actitud
positiva, confianza y apertura (sentimiento de libertad), participación,
tolerancia, respeto. Pero también hay puntos débiles: su límite es el
conocimiento combinado de sus miembros, pueden generar conocimientos erróneos,
se requieren habilidades sociales. En general la evaluación final se realiza
"al grupo", no individualmente.
En todo
aprendizaje, el contexto y el lenguaje son muy importantes, y en este marco
aprender significa "aprender con otros" (iguales o expertos), recoger
también sus puntos de vista, aunque cada uno construye (reconstruye) su
conocimiento según sus esquemas, su experiencia y su contexto. Sus integrantes
tienen diversos perfiles y por lo tanto pueden hacer diversas contribuciones a
los demás, que habrá de reunir e integrar.
Existen
canales para compartir los aprendizajes, facilitando interacciones entre sus
miembros donde se refuerzan los procesos individuales, en ellos la comunicación
se realiza tanto a nivel formal como informal.
Las
comunidades virtuales utilizan canales de comunicación telemáticos (e-learning),
Internet proporciona espacios compartidos que permiten intercambiar información
de manera eficaz, facilitando así la realización de actividades formativas
colaborativas entre alumnos separados geográficamente, que de esta manera
pueden comunicarse y compartir información durante el desarrollo de
determinadas actividades de aprendizaje.